Las acciones que componen una planificada estrategia de social email marketing serán de gran utilidad para incrementar tu lista de suscriptores, pues al compartir las campañas enviadas a través de diferentes redes sociales se potenciará de forma notable las oportunidades en este ámbito.
Una de las preguntas que más se plantean las pequeñas y medianas empresas es determinar si resulta más productivo hacer uso del email marketing o del social media en aras de captar un mayor número de clientes. No obstante, la respuesta no se reduce a la elección de uno u otro tipo de estrategia. El auténtico potencial consiste en saber compaginar a la perfección y aprovechar de manera conjunta las virtudes de ambos campos. Y, es que, lo idóneo sería utilizar las diferentes redes sociales para establecer conversaciones y estrechar vínculos con los seguidores, así como el correo electrónico para comunicarse con los clientes y mantenerse al tanto de las últimas novedades.
Estudios realizados en este ámbito han determinado que las empresas que utilizan los dos métodos cuentan con un listado de correo electrónico un 53% más amplio y optimizado que los que emplean únicamente el email marketing. Como valor añadido, el marketing de contenidos será perfecto para tener éxito en esta empresa.
Por medio de las acciones de social email marketing podrás extender el alcance de tu envío más allá de los usuarios que se han suscrito a tus contenidos. Todo ello, por no hablar, de que estimularás el vínculo emocional con los usuarios de tu comunidad. No hay que olvidar que las redes sociales son los canales de expresión idóneos para dar a conocer nuestras preferencias, intereses, logros, ambiciones y necesidades. Igualmente, se logrará incrementar el ROI de tus campañas, así como el alcance de tu mensaje.
Cómo potenciar campañas de social email marketing
Para potenciar tus campañas de social email marketing e incrementar tu número de suscriptores, considera los siguientes puntos fundamentales:
-Una de las primeras medidas para viralizar los mensajes es incluir en un lugar destacado botones que enlacen a las principales redes sociales como pueden ser Facebook, Twitter, Google+, Instagram o YouTube. Con ello se pretende incentivar a tus suscriptores a que compartan los contenidos enviados a través de ellas.
Cerca de estos botones se puede incluir una llamada a la acción para facilitar el camino o, incluso, se pueden plantear concursos para compartir la campaña.
-Además de establecer estos botones sociales, envía una invitación a tus seguidores y fans para suscribirte a tu newsletter, incluyendo un enlace en un tweet, una entrada en Facebook o en el timeline de Google+. Más concretamente, en Facebook es posible crear una página e incluir en ella un formulario de suscripción a tu campaña de email marketing.
-En lo referente al contenido transmitido, se deberán plantearse una serie de cuestiones como, por ejemplo, determinar si los mensajes son lo suficientemente valiosos y prácticos para que las personas decidan compartirlo en las redes sociales. Al mismo tiempo, se debería considerar la forma en que lo podemos integrar en los diversos canales de comunicación para no caer en la repetición y saturación de la audiencia.
-Es vital el hecho de comprobar el número de veces que tu campaña ha sido compartida en redes sociales y, en definitiva, cuál es la preferida por tus suscriptores. De esta manera, podrás adaptar el diseño y el tono comunicacional de tus envíos a las características y requerimientos de la plataforma social elegida para tus contactos.
Con este reporte podrás identificar cuáles son tus suscriptores más fieles y a los que puedes dirigir acciones un tanto especiales como descuentos o regalos en aras de recompensar su lealtad. Igualmente, sería interesante conocer quiénes hicieron clic en los diferentes links de tu campaña, así como la cantidad de clics por suscriptor y los totales repartidos por fechas.
El social email marketing, por lo tanto, se presenta como una alianza de dos modalidades de estrategia de lo más interesante y eficaz para aumentar la lista de suscriptores y, en definitiva, el alcance de nuestro mensaje. La clave está en saber combinarlas de la manera apropiada.