El PageRank dejará de ser utilizado públicamente por usuarios particulares y empresas como unidad de medida de sus páginas web, así lo han señalado recientemente desde el imponente Imperio regentado por Google.
Erigida como una escala de valoración creada por Sergey Brin y Larry Page (fundadores de la gran G), el PageRank (PR) asignaba un valor exponencial para determinar la relevancia de los sites. La importancia de esa web, con cifras que oscilan entre el 0 y el 10, se encontraba en función de los enlaces que recibe la página en cuestión y la calidad de los mismos.
Google acaba con el PageRank como valor de medida pública
Hasta ahora, cualquier usuario, ya fuera a nivel particular o profesional, tenía en sus manos la posibilidad de conocer el PR o valoración numérica de 0 a 10 que Google asignaba a su site. Lógicamente, cuanto mayor fuera esa cifra, mayor relevancia se le otorgaría a la web y, por consiguiente, más posibilidad tenía de escalar posiciones en el buscador, alcanzando mayor visibilidad y notoriedad entre los consumidores que navegan por la Red de redes interesados en los servicios relacionados con tu ámbito de actuación.
No obstante, como se indicaba con anterioridad, Google ha anunciado hace unos días que esta medida dejará de ser pública para convertirse en una herramienta privada, que gestionar el propio buscador en la intimidad de sus dominios. Todo ello supone que ya no tendremos la posibilidad de medir la relevancia de nuestra web, aunque se aclara que su efecto sobre el posicionamiento SEO granjeado hasta el momento prevalecerá pese a los cambios.
El PR se basa en la calidad de los enlaces entrantes de una web, que a su vez son determinados por las webs que enlazan a dicha página. A pesar de lo que muchos pudieran considerar en su momento, resulta directamente proporcional el hecho de que cuanto mayor sea el PageRank de una web, más visitas y notoriedad recibirá esa página.
Una web que es citada por otras del sector con cierto prestigio y reputación propiciará el hecho de que tenga un mejor posicionamiento en los resultados de búsqueda. No obstante, al tratarse de un algoritmo automático, el PageRank no es capaz de distinguir las citas fraudulentas de las que no lo son. Con el paso del tiempo, este mismo algoritmo fue perfeccionándose hasta el punto de que se publicó una api que nos otorgaba más información sobre la relevancia de nuestro site. A parecer, un porcentaje considerable de usuarios utilizaba esta información para aprovecharse del sistema, lo que llevó a que el PageRank fuera constantemente actualizado.
Tras muchos cambios realizados al respecto, finalmente se ha tomado la determinación desde Google de hacer desaparecer el PageRank, al menos como dominio público, puesto que, como se indicaba con anterioridad, el imperio de la G lo seguirá utilizando a nivel interno. Todo en un intento por «acabar con los abusos del sistema». Lógicamente todo lo que hagamos seguirá teniendo sus repercusiones en el posicionamiento de nuestra web como hasta el momento, pero el trabajo de SEO se complicará algo más a la hora de dar con la tecla exacta que mejore la visibilidad de una página determinada.
En cualquier caso, más allá de los enlaces entrantes y la valoración otorgada por el PR, hay otros muchos elementos a tener en cuenta para potenciar el posicionamiento de la web.