Mejorar la presencia de tu sitio web, haciéndolo más atractivo y sugerente para los usuarios en aras de llamar su atención frente a lo ofrecido por la competencia es uno de los objetivos que permitirá alcanzar a los desarrolladores web un lenguaje como CSS3.
Creado para separar el contenido de la forma, las llamadas «Cascading Style Sheets» u Hojas de Estilo en Cascada (CSS), permitirá a los diseñadores tener un control más preciso sobre la imagen de tu empresa en la Red. El diseño de un sitio web, pensado para la promoción de los productos y servicios, precisa de una serie de estrategias pensadas para que el espacio obtenga el resultado esperado y pueda convertirse en un referente entre los usuarios.
Perfecciona la apariencia de tu web con CSS3
Uno de los recursos a tener en cuenta para perfeccionar la imagen de la web es un lenguaje como el antes mencionado CSS, empleado para definir el estilo de aquellas páginas escritas con HTML. Mientras que este último nos permite determinar la estructura de una página, las hojas de estilo serán las encargadas de establecer las reglas de representación en diferentes dispositivos, ya sean pantallas de equipos de escritorio, móviles, portátiles, impresoras u otros.
En estos momentos momentos, la quinta y más recientes versión del HyperText Markup Language ha dejado de ser el futuro para convertirse en el presente, el líder de los lenguajes web que emplean todos los desarrolladores profesionales. No obstante, el lenguaje HTML no es el único que ha evolucionado, dado que de forma conjunta también ha crecido el CSS, perfeccionando sus funcionalidades con el tiempo.
Por medio de esta nueva versión de hojas de estilo tendrás la posibilidad de hacer que tu página cobre vida propia, tornándose más atractiva para los usuarios. Con las primeras especificaciones del lenguaje, se consiguió cumplir el objetivo inicial de las hojas de estilo antes mencionado: separar el contenido de la forma. No obstante, esas primeras versiones no otorgaban a los diseñadores un control absoluto sobre todos y cada uno de los elementos de la página, siendo necesario buscar otras alternativas complementarias para obtener efectos tan deseados como los bordes redondeados o el sombreado de los elementos de la página.
CSS1 supuso aplicar una serie de acciones complementarias para perfeccionar el estilo y representación de la página corporativa. Sin embargo, el riesgo era que este tipo de intervenciones podrían generar cambios notables en el contenido de la página al incorporar nuevas etiquetas HTML que desarrollaban estilos de manera más elaborada. A pesar de que CSS2 aportó novedades, la mayor perfección en el control de la página ha llegado con el actual CSS3.
De cara a los desarrolladores web, una de las innovaciones más interesantes de esta última versión de las hojas de estilo es la puesta en marcha de mecanismos que evitarán el uso de hacks, los cuales, a menudo, podían complicar el código de la web.
Creación de múltiples columnas de texto, propiedades orientadas a discurso o lectura automática de las páginas web, degradados lineales y radiales de repetición, hacer capas con múltiples opciones de fondo, rotura de palabras, opacidad a nivel cromático, selectores por atributos o bordeados y sombreados son algunas de las muchas propiedades nuevas de CSS3.
Las ventajas que apostar por este lenguaje puede aportar a tu sitio web son, por ejemplo, realzar la apariencia de los portales, haciéndose más suculentos desde el punto de vista estético para los usuarios. Las nuevas características incluidas por CSS3, no solo harán la página más atractiva, sino que al mismo tiempo funcionará correctamente, algo que agradecerá el usuario. Esto último le llevará a elegir tu página frente al resto de la competencia que no hace hincapié en este punto.
La organización a partir de menús y/o submenús son fundamentales en un portal, siempre y cuando se mantenga un orden al respecto para que el usuario no se pierda en la navegación. Las hojas CSS3 definirán este estilo de una forma más notoria que versiones precedentes, algo que aportará limpieza y claridad a la página.
Por medio de CSS3 y el uso de HTML5 obtendrás una web exacta desde el punto de vista semántico, fácilmente legible por los motores de búsqueda y una estructura lógica del documento, en especial si se corrigen los posibles errores. Con ello se ayudará al posicionamiento SEO de tu marca en la Red.
Igualmente con CSS3 y HTML5 los diseñadores podrán crear un sitio compatible con todos los navegadores, por lo que tu presencia se expandirá en la Red.
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